La mayoría de los enfermos hepáticos y sus familiares experimentan en algún grado síntomas que hacen precisa la intervención de un profesional para su adecuada resolución. HEPA proporciona atención psicológica a todas aquellas personas que padezcan una enfermedad hepática y a sus familiares. Esta atención contribuye notablemente a mejorar la calidad de vida de los enfermos y sus familiares.